TV Perlas De Agua Viva

Watch live streaming video from perlasdeaguaviva at livestream.com

miércoles, 22 de septiembre de 2010

El niño que no abrió su mano

El niño que no abrió su mano
Sucedió que un niño de cuatro años metió su mano en un costoso florero y no pudo sacarla de allí. La madre tampoco pudo sacar la mano del niño. Intentó arrimar el florero pero fue inútil. Siguió intentando con jabón. Pues no le quedó otra que resignarse y calmar al niño.

“Pronto va a venir papá y te va a quitar la mano”.

Podría haber roto el florero, pero era impensable ya que éste era un tesoro hereditario de varios años. Cuando llegó el padre a la casa, se encontró con el niño asustado y su esposa preocupada. El padre, luego de pensar, decidió romper el florero. Al martillarlo, el costoso florero comenzó a quebrarse y cuando se rompió, los padres se dieron cuenta de que el niño tenía el puño cerrado. “¿Todo este tiempo tenías el puño cerrado?”, preguntó el padre al hijo.

El niño llorando le afirmó con la cabeza. Entonces la madre le preguntó cariñosamente,

“¿Puedes decirme por qué lo hiciste?” Entonces el hijo le respondió; “Es que había una moneda adentro”, y abriendo su mano le mostró la moneda.

Al no abandonar el niño, la moneda, los padres tuvieron que romper el tesoro hereditario. Lo mismo puede pasarnos si nosotros no abrimos nuestras manos hacia Dios. Cuando Jesús oró a que se haga la voluntad del Padre y no la de Él, estaba abriendo sus manos hacia Dios entregando hasta su vida.


No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.
Mateo 6:19-21

Tomado del libro Tiempo Con Dios
(Desierta el liderazgo en ti) Bill Perkins

No hay comentarios:

Publicar un comentario